Festival de Cine "Alcances"

Alcances

Alcances nace de la iniciativa del escritor gaditano Fernando Quiñones en 1968. Su idea era hacer una semana cultural con diversas disciplinas artísticas, entre ellas el cine, difíciles de ver en el Cádiz de la época.

Sin embargo, la primera edición fue prohibida media hora antes de empezar su primera actividad. Alcances empezó efectivamente en 1969, y desde entonces no ha faltado a su cita ningún año. Sin embargo, esta frustrada edición siempre ha contado como la inicial y así ha figurado en su historia.

El festival ha pasado por diversas etapas. Hasta 1974 estuvo vigente la idea inicial de Quiñones de organizar una muestra multicultural, que contaba con un festival de cine que fue creciendo en número de proyecciones de año en año. En ese 1974 se dio una circunstancia decisiva, como la llegada a Cádiz como gobernador civil de Antolín de Santiago, que fue fundador y primer director de la Semana de Cine de Valores Religiosos de Valladolid, actual SEMINCI. Su implicación en Alcances llevó a ampliarlo a un mes, el Julio Cultural Gaditano donde las actividades de cine crecieron a tres semanas temáticas. En 1979 Fernando Quiñones deja la dirección y se la pasa a José Manuel Marchante, abriendo una etapa que llega hasta 1992. Alcances adquiere su sobrenombre de Muestra Cinematográfica del Atlántico y se centra sólo en cine, al pensarse que las otras actividades culturales ya empiezan a estar bien cubiertas en la ciudad.

Así, se crea un festival con vocación internacional formado por secciones típicas de un evento de estas características. En 1993 arranca una nueva etapa donde pronto destaca como máximo responsable José María Sánchez Villacorta. Hasta 2002 el concurso se centró en largometrajes españoles aunque seguían los filmes internacionales en las secciones paralelas. A partir de ese año el certamen pasa a ser de cortometrajes nacionales, hasta que en 2006 llegó un nuevo equipo coordinado por Vega López y el giro de toda la programación al documental. El auge de este género cinematográfico y la inexistencia de un festival dedicado específicamente al documental español, junto con la necesidad de que Alcances se especialice en el competitivo mundo de los cada vez más prolíficos festivales españoles, llevaron a esta decisión.

El resultado ha sido más que satisfactorio. Ocho años después Alcances ha conseguido ser un festival de referencia en el mundo del documental, conocido por todos los integrantes del sector por haber sabido aglutinar en sus fechas de septiembre a cineastas y otros actores del documental español, tanto en las proyecciones como en su carácter de punto de encuentro. El creciente interés edición tras edición por participar por parte de los cineastas nacionales es claro ejemplo, así como la mayor repercusión nacional que tienen las actividades de Alcances. Así, el veterano festival sabe cumplir con los objetivos con los que fue fundado y reciclarse para poder atender al cine más creativo de cada momento, al servicio de la difusión cultural.

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